¿Por qué no nos preocupa la muerte de millones de personas?

Tenemos un egoísmo inherente en nosotros. Es por eso que tenemos una tendencia a preocuparnos mucho menos acerca de un genocidio que un amigo con cáncer. Como David Ropeik señala en un artículo para la revista Psychology Today, tenemos un adormecimiento estadísticos que nos impulsa a preocuparse más por los problemas de un individuo que por los problemas de muchos.

A las personas del estudio se le pago por participar en un estudio psicológico relacionado, y al salir se les dio la oportunidad de donar hasta $ 5.00 de sus ingresos a Save The Children. Se les dio tres opciones:

* Podían donar para ayudar a Rokia, de 7 años de edad, una niña de Mali. A los participantes se les mostró una foto de Rokia. Ellos estubieron dispuestos a donar en promedio $ 2.25.

* Podían donar para ayudar a los cientos de miles de niños en el este de África que mueren de hambre. En general estubieron dispuestos a dar sólo $ 1.15.

* La tercera opción era para ayudar a Rokia específicamente, pero junto con esta solicitud, a los participantes se les dio también las estadísticas sobre los otros muertos de hambre los niños de África oriental. Las mismas personas que estaban dispuestos a dar $ 2.25 cuando se trataba de Rokia, sólo estaban dispuestos a dar $ 1.40 cuando la solicitud para ayudar a Rokia incluia información acerca de las estadística más grande!

Otros estudios mostraron resultados similares. Por ejemplo, la gente se mostro dispuesta a donar 11 dólares para salvar a un niño, pero sólo 5 dólares para salvar a ocho. Lo mismo ocurre con los eventos individuales, como un tsunami frente a un caso similar al curso los niños hambrientos. Simplemente no parecen tener el ancho de banda la atención emocional por mucho tiempo o para demasiada gente. Uno parece ser el número mágico para la empatía.

Aunque no por arte de magia se puede ajustar nuestro cerebro para empezar a preocuparse por millones de personas como nos preocupamos por un solo ser humano, o tener el poder para ayudar a un sinnúmero de personas, podemos ser más conscientes de ello. La próxima vez que se entere de una gran tragedia que parece tan lejos, imagine lo que podría ser para una sola persona que tiene que experimentarlo. Lo que decida hacer al respecto depende de usted, pero al menos su consideración no será tan deformado por los números.

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